TOMADO DE TRIBUNA
Las víctimas fueron secuestradas por un grupo armado en el ejido El Sauz, Sonora; sus familias exigen a las autoridades resultados en la búsqueda
Ures, Sonora.- El municipio de Ures, Sonora, se encuentra en alerta tras la desaparición de tres jóvenes el pasado domingo 9 de marzo, quienes fueron secuestrados por un grupo armado en el ejido El Sauz. Las víctimas están identificadas como Ulises Valenzuela Villegas, Ángel Gabriel Moroyoqui López y Óscar Armando López Ruiz. Sus familias han manifestado su profunda angustia y han solicitado el apoyo de las autoridades para dar con su paradero.
De acuerdo con el testimonio de los familiares, los jóvenes se encontraban en un domicilio alrededor de las 18:00 horas, cuando un pick up Chevrolet Silverado, color negro, doble cabina, arribó al lugar. De la unidad descendieron hombres armados, quienes obligaron a las tres víctimas a subir a la camioneta antes de huir con rumbo desconocido. Desde ese momento, sus familias perdieron todo contacto con ellos y temen por su seguridad.
Óscar Armando López Ruiz, de 25 años de edad, es de piel clara, barba, 1.68 metros de estatura y complexión mediana. Al momento de su desaparición vestía un pantalón café claro y una camisola deportiva azul marino de manga larga. Ángel Gabriel Moroyoqui López, de 21 años, delgado, de 1.80 metros de estatura, tez blanca y ojos café claro. Portaba un pantalón de mezclilla negro y una camiseta negra.
Ramón Ulises Valenzuela Villegas, de 25 años, delgado, de 1.78 metros de estatura, con barba negra y sin oreja derecha. Vestía una camiseta negra y un pantalón negro. Los familiares interpusieron la denuncia ante la Fiscalía General de Justicia del Estado, aunque expresaron su inconformidad por la falta de personal en Ures para recibir su denuncia de inmediato. Posteriormente, en la ciudad de Hermosillo, fueron atendidos por las autoridades.
En la mañana de lunes, los familiares de los desaparecidos se manifestaron a las afueras de la Fiscalía para exigir avances en la búsqueda. Rosana López, madre de uno de los jóvenes, relató entre lágrimas que su hijo se encontraba en la calle paseando a su perro cuando ocurrió el levantón. “Estaba con su primo y su amigo de toda la vida, porque somos vecinos, cuando llegó la camioneta y se los llevó. Desde entonces no sabemos nada”, lamentó.
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